Según la leyenda, un pastor, después de merendar, olvidó parte de su Queso Blanco y fresco en una cueva, allí el queso permaneció a la intemperie. Al regresar, lo encontró cubierto de moho azul, lo probó y le pareció que era más sabroso que antes.
Su sabor fuerte y ligeramente salado aumenta de intensidad con el tiempo de maduración. El Queso Azul de Alpina es ideal para las ensaladas, salsas o simplemente delicioso sobre pan, galletas y tostadas.
- El queso azul de Alpina aporta naturalmente nutrientes como proteínas, grasas y calcio.